Diario de PPK
Agosto 4, 2016
El problema está en que si Maduro tiene un pajarito que le habla, tú Peter Paul, tienes a tus marionetas saltando casi como para el final de la temporada circense, en pleno Palacio.
Estimado Pedro Pablo:
Si te das cuenta, no es que me sienta muy cómodo con este mensaje. A ver, ya no sé si la flaca Angela Huatay deba de seguir pasando por agua tibia. Se supone que es la encargada de tu imagen, y debería ser quien dirija tus respuestas ante la prensa, o que simplemente coordine sobre lo que vas a declarar, e intervenir como jefa de prensa. Oye, que a Obama si le preguntan por el precio de un galón de leche, supongo que le saldrá alguna genialidad como las tuyas, sólo que Obama lleva cómodo en la Casa Blanca sus dos periodos, y está con un generoso 58% de aprobación a meses de su salida -ni compararlo con su antecesor G.W. Bush. Pero no estamos en los States, y aquello de decir jalar, juajua. Algunos dirían que los quieres jalar y dar por reprobados, otros que los quieres forzar a un cambio de equipo, o finalmente como en los 80’s que se metan un porro y todo peace n’ love. Si pues todos manejamos bien el castellano y sus distintas acepciones.
Ahora aquello de llevar hoy a los ministros a hacer aerobics en Palacio, ¡too much! Si claro, que el deporte es bueno, que mañana inauguran las olimpiadas, que los de Bodytech con esto se ganaron una filial en la Casa de Pizarro, ¡awesome, dude! Pero el tema está en que tus ministros no son tus empleados, son las máximas autoridades del Ejecutivo, y ponerlos a saltar y sudar, es como usarlos en una corte de marionetas, y tú de titiritero. Verlo a Basombrío en shorts en plena Plaza de Armas capitalina, ¡fue lisérgico! Que la oposición va a criticar desde la marca de las zapatillas, hasta el que lo hagan con su plata y en sus respectivos gimnasios, eso se lo dejo a que ellos mismos lo fundamenten. El problema está en que si Maduro tiene un pajarito que le habla, tú Peter Paul, tienes a tus marionetas saltando casi como para el final de la temporada circense, en pleno Palacio.
Pedro Pablo, que ya no estás en campaña, ya estás de presidente. Pareciera que los reflejos de Premier, los has dejado guardados en la hacienda de Cieneguilla. Ya no tienes que convencer a nadie que gozas de buena salud, o que tienes una visión distinta, ya eso está, pero llevas seis días en la Presidencia y pareciera que sólo estamos con el ánimo de hacer fiesta. No estamos para llenar la pileta de la Plaza de Armas con pisco o champaña, estamos con el reloj que corre en contra. Si quieres prensa o desviar las miradas a algún lado, magnífico, la hiciste hoy linda, pero hasta ahora nada trascendente. Recuerda, como en nuestros viejos partidos de golf allá en Los Andes, es más bonito plantar con tu driver y un solo golpe un hoyo 3.
¡Ojalá mañana mejoremos!
PI